Es una palabra de género ambiguo. Se puede utilizar tanto en masculino como en femenino: el / la mar. Sin embargo, existen ciertos usos específicos en los que se puede notar una preferencia por uno de los dos géneros gramaticales. En español general se emplea en masculino, pero la gente del mar (marineros, pescadores) y los poetas lo utilizan en femenino.
Por otra parte, existen expresiones lexicalizadas en las que el género de mar no depende de la preferencia del hablante. Así, por ejemplo, mar se usa en masculino en la locución un mar de, que denota ‘abundancia’: un mar de contradicciones, un mar de dudas, un mar de lágrimas. En cambio, se usa en femenino: a) En expresiones que describen su estado: mar arbolada, mar picada. b) En locuciones propias del lenguaje marinero, como hacerse a la mar. c) En las expresiones coloquiales pelillos a la mar y echar pelillos a la mar. d) En la locución nominal alta mar, que también puede escribirse en una sola palabra como altamar. e) En la expresión de valor intensificador la mar de, que se construye con grupos nominales, con adjetivos o con adverbios, y que equivale a ‘mucho, muy’: la mar de amigos (muchos amigos), la mar de simpáticas (muy simpáticas), la mar de bien (muy bien).
El sustantivo mar puede ir seguido de un nombre propio que funciona como especificativo para identificar alguna de las extensiones de agua salada rodeadas de tierra. En estos casos, se escribe en minúscula: el mar Caribe, el mar Muerto, salvo cuando lo exige la puntuación, situación en la que sigue las pautas ortográficas usuales para el uso de las mayúsculas. Sin embargo, cuando mar forma parte del nombre propio de una región geográfica, debe escribirse con mayúscula inicial: Mar del Plata.
La locución adverbial a mares denota ‘abundancia’ y se combina con verbos como llorar, llover o sudar. A veces se usa como sinónimo de a raudales o a espuertas. Esta locución sigue la misma pauta que otras secuencias de valor adverbial que indican la manera en que fluye algo: a [+ sustantivo plural], como a borbotones, a cántaros o a chorros.